Wooooohoo. Tal y como el episodio dice, se centran totalmente en los Originales, especialmente en Klaus en este. Para mi este episodio ha sido uno de los más sentimentales, más reales, uno de los que más nos ha dejado ver los sentimientos de cada personaje.

Comienza con una visión de Elena encerrada sin tomar sangre y los hermanos Salvatore, como no, preocupados por ella, y teniendo fe es que su humanidad vuelva. No volvemos a saber de Elena, Estefan y Damon hasta el final del episodio, supongo que para dar la impresión de que se les ha dedicado más tiempo. En la última escena, Damon engaña a Elena dándole sangre con verbena, esperando de ella una reacción de miedo, rabia o simplemente traición. Sin embargo Elena se cierra en redondo a colaborar, entra al juego, y amenaza a los hermanos, sabiendo el poder que tiene sobre ellos.

En este capítulo también podemos ver a Katherine en la casa de Becka y los Salvatore, en mucho tiempo la verdad. Vemos su lado más cariñoso, vemos como al parecer se preocupa por Elijah, al cual, yo tengo mucho cariño, asique más vale que lo cuide. Me encanta cuando llega por primera vez en escena y le pregunta Damon “¿Kat?” y ella responde “La misma y la única... de algún modo” dejando caer que Elena es una réplica exacta suya.

Prácticamente el resto del episodio ronda sobre Klaus, en Nueva Orleans, donde se reencuentra con un “amigo” al que él mismo había creado y enseñado. Al principio parece que se van a meter en problemas, y sin embargo se dan tal sonrisa, que por unos segundos, he pensado, ui, pareja gay a la vista. Lo cual no sería ningún problema, si no fuera porque Klaus tiene que estar con Caroline. Lo primero de lo que te das cuenta cuando Klaus mira a su amigo es de la envidia que le tiene. A la vez odio, por conseguir todo lo que él mismo no tiene. El ha formado una familia increíble de vampiros, tiene una ciudad totalmente bajo su mandato y sangre fresca en cada rincón.

Aunque con forme se adentra en la noche, parece que Klaus siente remordimientos, no lo dice abiertamente, pero por su expresión facial, se puede decir que aunque a una parte de él le gusta tener controlados a todos, la otra parte logra ver el mal en tener a toda una ciudad esclavizada. Más aun después de ver el espectáculo que hace cuando una brujita hace magia y la matan en mitad de la calle.

También entra en acción Elijah, como no, protegiendo a su hermano, él siempre tan leal. Además de que da su vida con Katherine por él al final del episodio, una escena, que si analizamos con detenimiento, es muy triste, esta, sea probablemente una de sus últimas oportunidades. Katherine tendrá que huir, y entonces adiós a la pareja feliz.

Sobre el tema de Klaus siendo padre… ENORABUENA es decir, ya sé que no es con Karoline ni nada, pero, es una oportunidad de familia para él, no digo que tenga que vivirla con Haley. En un primer momento te preguntas si será todo un truco, y no que Elijah sepa de ello, es decir, quiere a su hermano, nunca le haría algo así. Pero a lo mejor de las brujas y Haley… ¿Quién sabe?

En un primer momento la reacción de Klaus es una incredibilidad ( y felicidad, entre líneas ) increíble, no consigue tampoco esconder su sorpresa en un primer momento. En cuanto se da cuenta de que ha mostrado lo que le pasaba por la cabeza, se niega en redondo a la idea de la felicidad, y huye, por miedo a que le manipulen, por rabia, y porque le hacía alegre algo tan simple. Creo que tenía miedo de que con el bebé le pudieran encontrar un punto débil. Pero una cosa esta clara, hasta antes de que salga de su boca, quiere tener al niño.

Y las escenas que más me han conmocionado han sido dos, en ambas Klaus se encontraba en las calles de Nueva Orleans. La primera se ve hablando con una mujer, que está mirando el mismo cuadro que él, con admiración. Y le pregunta a la chica que cual es la historia detrás de él. Cuando ella le rebela su opinión, Klaus llora, realmente se emociona, se da cuenta de lo solo que esta. Otra de las cosas que nos muestra esta escena, es que si a Klaus realmente no le importaran lo más mínimo los humanos simplemente no hubiera preguntado, y menos, se habría emocionado sobre ello. La segunda escena, como supongo que ya os imaginabais es un poco de Klaroline, aunque, como casi siempre, sea solo por parte de Klaus. Esa llamada de teléfono, es algo tan humano, tan natural, tan real y bonito… se le ve sonreír solo de abrirse a ella, solo esperemos que Caroline no rompa su corazón.